Noche sin luciernagas

Pues resulta que no puedo estar contigo más, el tiempo esta llamando y ahora me dejo llevar.

Pues resulta que me voy es por lo pronto por que termine mi vuelo junto a tí por que no me verás más. Y porque resulta preciso que sigamos separados, despedirnos es aún tiempo y con nosotros un asunto indispensable como el que un día nos reunio; despedir es devolver las libertades atrevérme y caminar sin ir a tí, es volver a dibujarnos cuando no esta la otra parte que nos hiciera esperar.

Si mi amor me dices si algo te pregunto y callamos y sabemos que el mundo seguía adelante porque nunca me decidiría a soltar mi vida, que se muy bien que puede que la vida nunca mas destelle igual, pero en tanto habita el tiempo entre nosotros y las hojas de los árboles se animan a volar.

Buscaré un silencio largo en donde el humo de un recuerdo no sean otra cosa más que nubes bajas, si recordaré las horas a tu lado como el sabor que he probado y nunca se llega a olvidar. Y cuando les mande mil mañanas nuevas ya se que también sabre de ausentes ratos que traerán la resignación y olvido de venturas y momentos que pasado son y que ya no lo serán más.

Y te llevaré conmigo y con mis pasos y con ello habré de aprender a vivir, si bien sé que tu lo sabes ya que tanto lo hemos visto como empieza con nosotros donde vamos.

Mi vida queriendo como nunca quize yo quien se viene hoy a marchar, pero cierto es que decir ya no te amo prolongo una despedida que elegiste tiempo atrás y por ella me encamino en esta noche sin luciernagas que se abre con las llaves de tu nombre.